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martes, 26 de octubre de 2010

Jornadas libertarias de otoño Málaga 2010


Con motivo del centenario de la Confederación Nacional del Trabajo, el Sindicato de Oficios Varios de Málaga ha organizado unas Jornadas culturales y reivindicativas que se desarrollarán a lo largo de los meses de octubre y noviembre, y, para las que se contará, entre otros, con la participación de compañeros de ortos sindicatos de esta misma organización. Proyecciones, charlas, presentaciones de libros, debates…, actividades todas que tendrán lugar en el local del sindicato, en C/ Martínez de la Rosa, 19. El calendario de las Jornadas es el siguiente:

Domingo 31 Octubre, 12h : Charla: “LA LUCHA CONTRA LAS CÁRCELES” A cargo de Amadeu Casellas. 26 años en prisión.

Sábado 6 Noviembre, 19h: Proyección película. "El honor de las injurias" dirigida por Carlos García-Álix 2007, 88 min.

El honor de las injurias es un documental sobre el anarquista madrileño Felipe Sandoval. Sandoval, un verdugo al servicio de la revolución. Felipe Sandoval (Doctor Muñiz) nació en los arrabales de Madrid en 1886 y fue albañil de profesión. “Doctor Muñiz, el enemigo público número uno”, le presentaba la prensa de la república. Sandoval fue uno de los principales ejecutores de “quintacolumnistas” en el Madrid asediado despiadadamente por las tropas de Franco durante la Guerra Civil. Antes se había iniciado en estafas, atracos, secuestros y asesinatos selectivos de pistoleros derechistas que, a su vez, se dedicaban a aniquilar a sindicalistas revolucionarios.

Sábado 13 Noviembre, 19h: Charla del compañero David Ordoñez de CNT-AIT Jaén sobre su libro “Agitación Anarcosindicalista” , publicado recientemente por la editorial “El grillo libertario”.

Viernes 19 nov 19h: Charla: "Fundamentos, actitudes y comportamientos de una organización criminal: La Iglesia católica" a cargo de Julio Reyero, CNT-AIT Toledo. "La presencia constante (visible o encubierta, pasada y presente) de la Iglesia en todos los impulsos para restringir el conocimiento y las libertades. Desde el aliento para provocar la muerte de Hipatia, Giordano Bruno, o más cercano en el tiempo Francisco Ferrer i Guardia, hasta la condena de la libertad de prensa y del socialismo en todas sus variantes (incluyendo por supuesto al anarquismo) durante el siglo XIX. De sobra es conocida su colaboración con el régimen franquista, la Alemania nazi y la Italia fascista. Sus escándalos económicos como el que tuvo por epicentro al Banco Ambrosiano, el estar hoy en día entre los 10 países del mundo donde más se blanquea dinero procedente de actividades criminales (según London Telegraph) o los escándalos de pederastia allí donde se encuentren (de EEUU a Australia, y por supuesto, también en España) no les hace avergonzarse lo suficiente para estar en silencio. Siguen acusando de asesinato a las mujeres que abortan o responsabilizan a la liberación sexual del maltrato machista, o a los ateos de todo mal que nos aflija, como castigo divino provocado por nuestra postura (así se expresaron tras los efectos del huracán Katrina)".

Sábado 27 nov 17 horas: Presentación del libro de Raul Ruano “Sociología y Anarquismo” editado por la Fundación de Estudios Libertarios Anselmo Lorenzo.

Publicado en Málaga la Roja

miércoles, 20 de octubre de 2010

Contra el asedio del silencio


El empeño del hijo de un carabinero fusilado en 1937 por encontrar la fosa de su padre abre la memoria oculta de la violencia en la guerra y en la posguerra en Alfarnatejo

Encarna MaldonPepe Alba tenía 18 años el día que se atrevió a romper la frontera personal, invisible y hasta entonces infranqueable que separaba Colmenar de Alfarnatejo. Aquel día condujo a bordo de su Montesa los 19 kilómetros que separan ambos pueblos para avisar a sus familiares de la muerte de su abuela materna. Era la primera vez que pisaba el suelo en el que su padre, el carabinero Salvador Alba, había sido fusilado y enterrado clandestinamente el 18 de febrero de 1937. "Mi recuerdo es una ráfaga", una imagen desdibujada, casi improbable grabada en la mente de un bebé de 11 meses. "Era muy chico, estaba en la cuna y recuerdo a mi padre como una ráfaga. Había estado de servicio y venía a verme... Yo estaba allí, en la cuna". En realidad la imagen paterna la ha labrado a partir del relato oral que a duras penas ha logrado abrirse camino a través de la losa del silencio y del olvido que impusieron 40 años de dictadura. "Mi madre nunca hablaba. Sólo decía que lo habían matado en Alfarnatejo. Poco más".

Creó su memoria con los retazos que arrancó a hurtadillas desafiando la regla no escrita de cuanto menos se sepa y menos se hable, mejor. Así supo que su padre, tras licenciarse en la Guerra de África con el grado de sargento ingresó en el cuerpo de Carabineros y tras pasar por Algeciras, Marbella y Málaga llegó al cuartel de Colmenar. Allí le sorprendió el golpe de Estado y la rápida entrada de los italianos que, sin apenas resistencia, tomaron el norte de Málaga en su marcha hacia la capital que seguía fiel a la República.

Los Alba habían sido una familia reconocida en Alfarnatejo, donde su tío, Miguel Alba, fue alcalde y su abuelo juez de paz. Ambos fueron fusilados en el cementerio de San Rafael de Málaga. "Mi abuelo materno le advirtió que la situación era delicada para él, pero mi padre pensaba que como él no había tenido ningún protagonismo no tenía nada que temer y se presentó", o sea se puso a disposición de las fuerzas golpistas que se habían hecho con el mando de Colmenar. Junto a él se entregó también el brigada del puesto Francisco López. Salvador Alba tenía 39 años, tres hijos nacidos, la mayor de seis años y el cuarto de camino, y Francisco López 50 años.

Sin embargo, todo se torció. La familia tiene la sospecha de que un pariente delató a Salvador Alba. Lo cierto es que el carabinero y el brigada fueron recluidos en el cuartel de Colmenar y trasladados una noche a Alfarnatejo junto a Fernando Conejo, un recovero de Riogordo de 19 años que se ganaba la vida comprando y vendiendo por los cortijos. Los tres fueron fusilaron un poco antes de llegar al pueblo. Los enterraron en una fosa común en el cementerio, "pusieron hasta un vigía para que nadie se acercara y pudiera contar dónde estaban los cuerpos". "Y así estuvieron 40 años, sin que nadie se atreviera a decir nada hasta que murió Franco". Sólo había oído que por las noches había quienes tiraban flores por encima de la tapia del cementerio.

Pepe Alba, que de niño desviaba a los presos recluidos en Colmenar los bocadillos que su madre hacía para vender a los soldados y que en 1957 ingresó en el Partido Comunista, volvió a Alfarnatejo a la muerte de su madre. Quería saber dónde estaba su padre enterrado, pero "era tanto el miedo y el silencio que nadie contaba nada". La Asociación contra el Silencio y el Olvido y por la Recuperación de la Memoria Histórica de Málaga recogió el testimonio de la familia y gestionó con el Ayuntamiento y la Junta de Andalucía los permisos para tratar de localizar la fosa de Salvador Alba. El 10 de octubre del año pasado realizaron un sondeo, dirigido por el arqueólogo Andrés Fernández, con resultado negativo. Sin embargo, el Ayuntamiento, que tenía en curso el traslado de los enterramientos del antiguo cementerio al nuevo, encargó al equipo técnico la exhumación de todos los restos. "En un pueblo pequeño un cementerio es casi tabú. Su traslado o se hace con mucho cuidado o hay problemas", resume el alcalde, Antonio Benítez (PSOE). La mejor fórmula era, por tanto, utilizar las técnicas arqueológicas del grupo que dirigía Andrés Fernández para exhumar los restos de un recinto que data de finales del siglo XIX, en el que se habían sobrepuestos enterramientos.

El equipo estaba en junio de este año desmontando el cementerio por sectores cuando encontraron bajo la sepultura de un matrimonio restos humanos "en una disposición tal que se veía claramente que habían sido arrojados. Vimos que uno de los cráneos tenía un impacto de bala y pensamos que eran el carabinero Salvador Alba y el brigada Francisco López, pero un vecino del pueblo nos dijo que no, que eran dos hermanos de Alfarnate", explica el arqueólogo Andrés Fernández. De nuevo la memoria oral se ponía en marcha. De acuerdo con los estudios realizados a partir de estos relatos, el equipo ha establecido que estos cuerpos son los de los hermanos Manuel y Francisco Robledo, Los Postemas, de 18 y 40 años. Les aplicaron la ley de fugas y los mataron por la espalda en diciembre de 1949 por avituallar a la partida El Candiles, que lideraba el maquis en estas sierras hasta cayó en el cortijo El Cuartillo, en Riogordo.

A medida que el cementerio se desmontaba la memoria clandestina ha ido se ha ido abriendo paso. Juan Peñuela tiene 86 años. Era un crío cuando, en 1936, los milicianos fusilaron a Los Garabatos en el cortijo El Jovo. Al parecer los milicianos quisieron requisar a estos hermanos de Loja (Granada) el ganado que guardaban en la finca arrendada para, en una suerte de redistribución de la riqueza, llevarlo al economato que habían instalado en la iglesia del pueblo. Juan ha guardado silencio durante 74 años. Al equipo le habían contado que Los Garabatos habían sido fusilados pero no sabían dónde podían estar. Le preguntaron a este octogenario de vitalidad arrolladora pero negó saber nada. Poco después, sin embargo, señaló el sitio en el que estaba la fosa: en el exterior del cementerio, junto a la tapia. Y allí el equipo de Andrés Fernández encontró los restos de Los Garabatos convirtiendo la intervención arqueológica de Alfarnatejo en la primera de España en la que salen a la luz la violencia de la guerra, ejercida por los dos bandos, y la opresión posterior.

Rafael Molina, que desde hace dos años trabaja como voluntario para la Asociación contra el Silencio y el Olvido, matiza, no obstante, que "para los milicianos los crímenes fueron algo coyuntural, mientras que durante el franquismo los crímenes fueron algo estructural". Puestas al descubierto estas dos fosas y con el cementerio prácticamente desmontado, el desánimo había comenzado a cundir. Los restos de Salvador Alba seguían sin aparecer. "Sólo quedaba una pequeña zona sin excavar, apenas a dos metros de donde hicimos el sondeo arqueológico negativo. Nos decían que allí habían enterrado a unos marroquíes fallecidos en los 80 en un accidente de tráfico. Empezamos a excavar y, efectivamente aparecieron estos cuerpos, pero debajo encontramos otros tres entremezclados". Por sus características morfológicas todos los indicios apuntan que se trata de Salvador Alba, Francisco López y Fernando Conejo.

Setenta y tres años después de que fuese fusilado el carabinero de Colmenar, Pepe Alba llora. Comienza a cerrar su prolongado duelo. Dice que la Ley de la Memoria Histórica ha sido "una gran victoria para nosotros, las familias, pero también para la democracia". Ahora lo que pide es que "se lleve a los colegios para que se sepa lo que es una guerra civil, de hermanos contra hermanos".

Los cuerpos han sido trasladados al nuevo cementerio de Alfarnatejo y el Departamento de Medicina Forense de la Universidad de Málaga ha comenzado a tomar las primeras muestras para realizar las identificaciones genéticas. Además, la asociación está tratando de localizar a los familiares de Los Garabatos y del recovero de Riogordo para informarles del hallazgo y ofrecerles la opción de las pruebas de ADN. Hasta ahora sólo se han negado los familiares de Los Postemas, los milicianos que ayudaban a los hombres de la sierra que en plena represión luchaban contra la dictadura comandados por El Candiles.ado. Alfarnatejo 17.10.2010

sábado, 16 de octubre de 2010

I Jornadas itinerantes "Sin justicia no hay memoria" videoforum contra la impunidad del franquismo


-Lugar: Excma. Diputación Provincial de Málaga, C/ Pacifico nº 54 Málaga.

PROGRAMACIÓN

29 de Octubre

18.30H Presentación de las exposiciones de la 2º Republica:

- Esperanza de un pueblo

- Presentación fotográfica de la Exhumación de Villanueva del Rosario

- Proyección del documental "Once Voces una Historia". Que trata sobre la exhumación de 11 republicanos, cuya memoria y restos se rescataron de una fosa común situada en una cuneta, en la localidad de Villanueva del Rosario (Málaga) realizada por el Foro por la Memoria de Andalucía y la Federación Estatal de foros por la memoria en septiembre de 2007.

30 de Octubre

11:00h comienza con la presentación del Videoforum, (Foro por la memoria de Andalucia)

- Intervención del compañero Arturo Peinado,(Federación Estatal de Foros por la memoria)

- Proyección de videos para la reflexión.

- Descanso para ir a comer.

17:00H Proyección del documental “Septiembre del 75”

- Debate

- Cierre y Conclusión

Organiza Foro por la memoria de Málaga,
tlfno:665917583

miércoles, 13 de octubre de 2010

Presentación de la Asociación de Memoria Histórica de Antequera y comarca



Estimado amigo:

El próximo día 15 de octubre, viernes a las 20 h., tendrá lugar en las instalaciones del Archivo Histórico Municipal de Antequera, el acto de presentación oficial de la "Asociación para la recuperación de la Memoria Histórica de Antequera y Comarca"

En el acto intervendrá el presidente de la Asociación, José Luis Conde Ayala, que informará a los medios y presentes de los objetivos de esta nueva agrupación.

Posteriormente se proyectaran los siguientes vídeos:

- "Exhumación de la fosas del cementerio de San Rafael (Málaga)"

- "La primera curva... a la derecha", documental dirigido por Jorge R. Puche

Que serán introducidos por el arqueologo Francisco Melero García.

Te rogaría transmitieras esta nota a todos los medios de comunicación para su divulgación máxima, así como a cualquier persona o colectivo que pudiera estar interesado, a fin de contar con su presencia el referido día y hora.

Para cualquier aclaración, puedes hacerlo a través de este correo o bien en el teléfono del Presidente José Luis Conde Ayala: 625 62 69 52.

Sin otro particular recibe un cordial saludo,
Francisco Melero
Secretario.

domingo, 10 de octubre de 2010

Defensa honra a 19 milicianos republicanos

El coronel Díaz Ripoll

Enterrados en Granada 19 carabineros fusilados en 1937

Los 19 de Melegís, que habían llegado a la zona en desbandada tras haber caminado unos diez días desde Málaga y que fueron fusilados de un tiro en la nuca, tienen ahora un panteón en el cementerio municipal

"Los vecinos nos pidieron que se les diera una misa funeral. Es la forma de enterrar en nuestra cultura y lo hemos hecho del mismo modo que enterramos a cualquier persona en nuestro pueblo", explicó el alcalde

AMINA NASSER GRANADA 08/10/2010 Entre el 15 y el 25 de febrero de 1937, diecinueve militares del Cuerpo de Carabineros fueron apresados por las tropas falangistas, fusilados y enterrados en una fosa común en las afueras de Melegís, en el municipio granadino de El Valle. Ayer, 73 años después, sus restos recibieron sepultura.

El funeral por los milicianos siguió el ritual católico. Los restos óseos de cada uno de ellos y las pocas pertenencias que podían llevar fueron depositados en pequeñas cajas de madera, con una cruz tallada sobre la tapa y un número. Nadie conocía sus nombres, ni sus domicilios ni si tenían familia Las pruebas de ADN realizadas tras la exhumación de los restos por la Asociación Granadina para la Recuperación de la Memoria Histórica (AGRMH), el pasado año, desvelaron que eran muy jóvenes, la mayoría de 16 a 20 años. La identificación de las víctimas ha sido imposible. Pero los 19 sin nombre recibieron ayer una sepultura digna.

Vecinos del municipio trasladaron los restos al interior de la iglesia. Y allí colocaron sobre cada caja una rosa roja. "Estas personas murieron de forma cruenta", dijo el párroco de Melegís al iniciar la misa. "Se merecen esta despedida", agregó después. "Yo no soy quién para imponer a nadie mis creencias pero la historia está ahí. Hemos de sacar experiencia para que no se vuelva a repetir".

La iglesia estaba abarrotada. Entre los asistentes había algunas autoridades provinciales y estaba el subdelegado de Defensa en Granada, el coronel Juan Antonio Díaz Ripoll, y el alcalde de El Valle, el socialista Juan Antonio Palomino. Por primera vez, el Ministerio de Defensa enviaba a un representante a un funeral de milicianos republicanos. Lo había solicitado el regidor. "No hay que olvidar que eran soldados españoles que defendían la legalidad democrática", subrayó Palomino al concluir la misa. Algunos de los que acudieron al acto se preguntaban por qué se había iniciado el entierro con un funeral católico. "Los vecinos nos pidieron que se les diera una misa funeral. Es la forma de enterrar en nuestra cultura y lo hemos hecho del mismo modo que enterramos a cualquier persona en nuestro pueblo", explicó el alcalde.

Un panteón

En la puerta de la iglesia, miembros de la Asociación Granadina para la Recuperación de la Memoria Histórica recordaban el día en que abrieron la fosa. "Vi la tragedia reflejada directamente, podías oler la muerte muy de cerca", comentó el arqueólogo y profesor de la Universidad Francisco Carrión. Junto a los restos óseos, se encontraron distintivos militares, botones, trozos de lápiz, alguna cuchara y munición.

Los 19 de Melegís, que habían llegado a la zona en desbandada tras haber caminado unos diez días desde Málaga y que fueron fusilados de un tiro en la nuca, tienen ahora un panteón en el cementerio municipal. Ayer los enterraron allí. Un epitafio los honra. "Aquí yacen 19 soldados españoles fusilados en 1937 por defender las libertades democráticas".

viernes, 8 de octubre de 2010

Familiares anuncian el primer estudio conjunto de la Carretera de Almería


Las asociaciones para la recuperación de la memoria histórica de Málaga y Granada se unen

LUCAS MARTÍN. MÁLAGA 07 de octubre de 2010   Las asociaciones de familiares de las víctimas de la represión y la Guerra Civil de Málaga y Granada tienen previsto iniciar la primera investigación pormenorizada y conjunta sobre los sucesos de la Carretera de Almería, proyecto que comenzará presumiblemente a principios del próximo año y que está pendiente de la asignación de una partida presupuestaria por parte del Gobierno.

Según Francisco Espinosa, de la Asociación contra el Silencio y el Olvido, por la Memoria Histórica, la idea surgió a través de diversos encuentros mantenidos con la presidenta del colectivo en Granada, Blanca Brenes, que se mostró interesada en registrar de la manera más rigurosa posible una huida tan luctuosa como llena de incertidumbres. El estudio, que pretende incorporar a especialistas de las universidades de ambas provincias, aspira a escrutar los hechos desde una gran variedad de perspectivas y arrojar nuevos datos sobre uno de los capítulos más crueles y siniestros de la historia de la Guerra Civil. La propuesta incluye por primera vez la posibilidad de atender a los sucesos en tramos pertenecientes a las dos zonas de Andalucía en las que discurrió la mayor parte de la persecución.

Uno de los objetivos de la investigación, indica Espinosa, consiste en establecer un mapa de las fosas que sacuden el itinerario como consecuencia de los ataques indiscriminados de la artillería nacional e italiana. Muchos de los fallecidos quedaron sepultados en cunetas, aunque también existen otras hipótesis a las que tratará de dar respuesta el estudio. Espinosa apunta a la existencia de caminos alternativos, casi improvisados por las víctimas en el intento desesperado de eludir el acoso de las tropas fascistas. «En muchos tramos se alejaron de la costa e intentaron huir por el monte. «Lo que queremos precisar es exactamente el camino que siguieron», indica.

A pesar del interés y el esfuerzo de historiadores y novelistas, la peregrinación por la Carretera de Almería está lejos de resolver algunos de sus puntos primordiales. Se desconoce con precisión el número de víctimas, que se calcula con un guarismo de millares. Los testimonios escasean. La mayoría de los supervivientes no superaban los doce años en el momento de emprender el camino, por lo que todavía faltan renglones por escribir acerca de la trágica huida de miles de personas a la llegada de los militares.

De lo que no cabe duda es de la magnitud de los sucesos, de una dimensión tan pavorosamente trágica que explica, por sí misma, el cometido elemental de la historia en sus pasajes más abrasivos. La investigación parte con la intención de abarcar de manera integral la masacre a través de la metodología que tan buenos resultados ha reportado en estudios como el llevado a cabo en el antiguo cementerio de San Rafael, que combinó los testimonios archivísticos y orales con el trabajo puramente científico. El proyecto, además de su carácter pionero, entronca además con los objetivos esbozados en la Ley de la Memoria Histórica.

Precisamente, la labor en el camposanto de la capital, considera modélica e inspiradora de la legislación desarrollada posteriormente por las administraciones, afronta su recta final después de la exhumación del recinto, que ha permitido recuperar los restos de 2.840 personas. De acuerdo con Espinosa, los trabajos, que contaron con la colaboración de la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento, además de la Universidad de Málaga, están pendientes de perfilar sus dos últimas fases: la elevación del mausoleo conmemorativo y la extracción de las pruebas de ADN.

La primera de ellas, que pretende convertir una sección del futuro parque que albergará el cementerio en un espacio consagrado a la memoria, cuenta ya con el diseño del panteón y del monumento funerario.

En cuanto a los exámenes de laboratorio, que se iniciaron con la toma de muestras genéticas de los familiares, se espera iniciar lo antes posible la parte más ardua: el estudio de los restos, científicamente enmarañado por el nivel de deterioro que presentan los cuerpos. Se trata del proyecto de identificación de víctimas de la Guerra Civil y de la represión más ambicioso del país, tanto por su volumen como por los desafíos analíticos que plantea el estudio, en el que los especialistas tendrán que lidiar con dificultades añadidas como el uso de cal viva, utilizado en la inhumación de buena parte de los fusilados. La Universidad de Málaga tiene previsto conformar el equipo que se ocupará de la última parte de una investigación dura y necesaria.

Charla-Debate: 12 de Octubre. Nada que celebrar


Charla-debate sobre la conquista de América y los conflictos nacionales actuales en el Estado Español

Sábado 9 de Octubre. 20:00 h.

Lugar: La Casa Invisible (c/Nosquera nº 9 y 11. MALAGA)

Organiza: COORDINADORA ANTIFASCISTA DE MÁLAGA

Recuperados los restos de siete fusilados durante la Guerra Civil


Los trabajos comenzaron hace un año en la fosa del antiguo cementerio de la localidad malagueña de Alfernatejo y se espera que pueda haber más restos en la zona

Público.es. EP Málaga 07/10/2010
Un equipo de arqueólogos, en coordinación con la Asociación Contra el Silencio y Olvido y por la Recuperación de la Memoria Histórica en Málaga y con el Ayuntamiento del municipio malagueño de Alfernatejo, ha recuperado los restos de siete personas fusiladas durante la Guerra Civil, que fueron arrojadas en tres fosas comunes situadas en el antiguo cementerio de la localidad.

Los trabajos comenzaron a ejecutarse en octubre de 2009 con los primeros sondeos de la zona, aprovechando el traslado de los restos a un nuevo camposanto y ha concluido en julio de este año.

Sin embargo, aún queda por exhumar otra fosa en la que pueden encontrarse otros dos fusilados, de la que aún se desconoce el lugar exacto de su ubicación.

Restos de ambos lados

Los fosas pertenecen a tres periodos diferentes y a fusilados de las dos fuerzas en combate. En este sentido, el presidente de la Diputación, Salvador Pendón, ha destacado "la singularidad" de esta investigación por tratarse de "la primera vez que se recogen restos humanos de los dos bandos de la Guerra Civil".

Se buscaban a dos carabineros y un campesinos pero puede haber muchos mas cuerpos

En un primer momento, la investigación tenía como objeto la búsqueda de tres cuerpos pertenecientes a dos carabineros y a un campesino de la localidad, que fueron asesinados por el régimen franquista en febrero de 1937 y cuya fosa fue encontrada en la última fase de la intervención.

Sin embargo, la aportación de los vecinos de la zona y el desarrollo de investigaciones complementarias durante el transcurso de la intervención desvelaron la existencia de un mayor número de víctimas situadas en el mismo municipio malagueño.

De esta forma, el equipo de arqueólogos, bajo la dirección de Andrés Fernández, encontró en una misma fosa los cuerpos de dos hermanos de Alfarnatejo que, según los vecinos, "fueron acusados de pertenecer a izquierdas". Una vez concluida la guerra, se les aplicó la ley de fuga por dedicarse a la "extorsión y el pillaje" y, finalmente, fueron tiroteados en diciembre de 1949.

Seguidamente, fueron encontraron los restos de otros dos cuerpos pertenecientes a dos hermanos de Loja (Granada) que, según los testimonios orales, "fueron fusilados por fuerzas milicianos al considerarlas personas no adeptas a la revolución", en 1936.

Labor pública y privada

Arcas ha aludido al relevo generacional que se ha producido en los trabajos de recuperación de memoria

Por su parte, el catedrático de Historia de la Universidad de Málaga, Fernando Arcas, quien ha asistido al acto de presentación de proyecto, ha aplaudido el trabajo de las administraciones, que "poco a poco están cumpliendo una tarea que se ha dilatado mucho tiempo por el mismo proceso en el que se produjo la transición desde la dictadura hasta la democracia en España", así como a las organizaciones sociales que trabajan de manera voluntaria.

En este sentido, se ha referido a la Comisaría de la Memoria Histórica de la Junta de Andalucía, a las diferentes asociaciones de la Memoria Histórica, a las universidades andaluzas y a la Diputación Provincial de Málaga, que ha subvencionados la totalidad de los trabajos del proyecto de Recuperación de Memoria Histórica, valorados en 30.000 euros aproximadamente.

De esta forma, ha manifestado que "este esfuerzo conjunto está restableciendo una tarea que debiéramos haber podido hacer mucho antes y que, en muchos casos, ha tenido que ser impulsada por nuevas generaciones que no han estado conforme con cómo habíamos decidido cerrar el debate sobre nuestro pasado en esa época de la transición".

sábado, 2 de octubre de 2010

Funeral en el cementerio de Melegis por los 19 carabineros que huian de las tropas fascistas en Málaga en 1937



Viernes, 08 de octubre · 17:00 - 20:00

Lugar: Iglesia de Melegis. Acto civil en el cementerio de Melegis

Estimados Amigos, tengo el honor de comunicaros junto con el Excmo. Ayuntamiento de El Valle, que el próximo viernes 8 de octubre tendrá lugar el funeral de los 19 carabineros que exhumó la AGRMH en Melegis.

Espero podais acompañarnos. Un abrazo.
 

viernes, 1 de octubre de 2010

4.800 historias en busca de identidad


Comienzan las pruebas de ADN a los casi 3.000 restos humanos hallados en el antiguo cementerio de San Rafael
Algunas de las vivencias personales empiezan a conocerse

Pablo Piñero - Málaga  26.09.2010

Cuando Vicente vio a una guapa mujer que pasaba por su lado no se lo pensó ni un momento a la hora de echarle un piropo. Trabajaba como zapatero en la calle Carretería cuando vio a la joven y no dudó en decirle algo bonito. Pero a ella pareció no gustarle demasiado; tanto, que lo denunció a la Policía. Los agentes detuvieron a Vicente y su suerte no hizo más que empeorar: por sus apellidos y su corta estatura lo confundieron con su hermano, El Curruco, con antecedentes en la guerrilla republicana. Fue encarcelado. Y unos días después, en el trayecto que iba de la cárcel hasta el cementerio falleció de un ataque al corazón: sabía que iba camino de ser fusilado.

El de Vicente es el único de los cerca de 3.000 restos mortales exhumados en el cementerio de San Rafael que se ha identificado hasta el momento. Todo coincide: el cuerpo estaba donde un sepulturero había dicho a su familia años atrás y el tamaño del esqueleto también. Ahora puede llegar la confirmación científica. La próxima semana comienzan los análisis de ADN de los huesos encontrados, según confirmó el director de los trabajos, el arqueólogo y decano de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Málaga, Sebastián Fernández. Una ardua labor de la que se espera que, próximamente, sirva para poner nombre y apellidos a muchos otros restos hallados en la considerada como mayor fosa común de represaliados de la Guerra Civil y el franquismo, una necrópolis recuperada tras tres años de excavación.

En Parcemasa, donde han permanecido en cajas numeradas los restos hallados en San Rafael, "ya están acomodando el local" para los trabajos de identificación, según Fernández. Es el turno del equipo del profesor Ignacio Santos, del departamento de Medicina Legal de la Facultad de Medicina de la Universidad de Málaga, que será el que realice los análisis. El año pasado se practicaron las pruebas de ADN a 300 familiares de desaparecidos y es el momento de conseguir nuevos datos para cruzarlos. Pero no será un trabajo nada fácil: ni por el volumen de represaliados, ni por el nivel de descomposición de los restos humanos ni por el hecho de que muchos cuerpos fueran tratados con cal viva, lo que afecta al tejido óseo, según los especialistas.

Una de las identidades que se podrán encontrar serán los de Remigio Hevia Ordiz, un asturiano que debió escapar desde su tierra natal dos veces a Francia. Perteneciente al ejército republicano, en 1941 se decidió a viajar a Málaga para trabajar en el campo, donde entró en contacto con grupos de guerrilleros y, más tarde, con un barbero de Coín. Sus reuniones dejaron claro que hacía falta dotar de mayor fuerza a los compañeros que estaban escondidos en la sierra, así que buscaron armas. El propietario de un taller en la Alameda de Colón consiguió que dos policías le vendieran dos pistolas. Un agente asturiano comenzó la investigación ante la desaparición de las armas y, casualmente, encontró a Remigio en la calle Mesón de Vélez, en el centro de la capital. Lo conocía de confrontaciones anteriores y le encontró una de las armas encima. Tras un tiempo de cárcel, un consejo de guerra sirvió para dictar su fusilamiento, así como otras cinco personas implicadas en el caso, incluidos el barbero y los dos agentes. Todos están en San Rafael.

El responsable de la Asociación por la Memoria Histórica, Francisco Espinosa, lleva en un pen drive un archivo Excel donde recoge todos los nombres que protagonizan historias como la anterior en un listado donde hay en total 4.800 nombres. También sus motes, sus orígenes, su familia, su día de fusilamiento. La lista comienza el 7 de febrero de 1936 y acaba en el año 1954. De 4.500 de ellos ya ha confirmado que sus restos descansan en las fosas de San Rafael gracias a un arduo trabajo de investigación de una década; y aún sigue con fuerzas para investigar la situación de los restantes 300. Son nombres que, prácticamente, se conoce de memoria. "La historia de cada uno es especial y muy particular. Pero todos se cruzan en lo mismo: fueron fusilados por las fuerzas franquistas y sus restos acabaron en San Rafael", explica Espinosa, cuyo objetivo es "que no quede en el olvido todo lo que ocurrió a tantísima gente". Mucho de lo que le ocurrió a esos 4.500 nombres lo conoce muy bien Espinosa, uno de los mayores investigadores de la memoria histórica del país.

Emilio Ferro Moya es otro de esos nombres cuya historia conoce bien este sindicalista ya jubilado. Ferro Moya alcanzó el cargo de teniente armero en el ejército republicano. Al acabar la Guerra Civil, "fue hecho preso en el penal de Burgos hasta que le indultaron y enviaron a Málaga cuando le fue detectada la tuberculosis", relata Espinosa. Vivía junto a su familia en la calle Cabello y en la Alameda de Capuchinos puso una tienda de máquinas de escribir. Pero tras una revuelta de la guerrilla las fuerzas franquistas se lo llevaron al cuartel. La Guardia Civil le inculpó de ser el responsable de infraestructura de la guerrilla urbana "y con sus antecedentes, el final estaba claro", añade Espinosa. Él conoce bien la historia porque se la contó el sobrino de Emilio Ferro, que duda mucho de la versión definitiva encontrada en la documentación franquista: "Muerto en tiroteo en las contadoras, en la sierra de Málaga, junto a otros cinco compañeros: Julián Cano Medina, José González García Ojales, José Jiménez Gámez, Antonio López y González Bastian". Todos acabaron en San Rafael.

También están allí los nombres de 38 presos por vitorear a la República en la brigada 10 de la cárcel de Cruz de Humilladero. Según los consejos de guerra del caso, uno de ellos había servido al ejército de la república y, en su camino por las instalaciones carcelarias, reprochó al Guardia Civil: "Me vais a fusilar por hacer lo mismo que tú haces ahora. ¡Viva la república!" A lo que respondieron todos los que estaban en la brigada 10 con el mismo grito. La investigación acabó con todos ellos fusilados en San Rafael.

Un lugar donde también acabaron muchos de los 26 presos que se fugaron de la cárcel el 1 de mayo de 1946. Lo hicieron a un modo similar al que reflejan películas como La Gran Evasión o Cadena Perpetua. Entre todos, hicieron un túnel que partía bajo una de las camas de la enfermería y llegaba hasta el exterior del centro penitenciario, dejando los escombros en el hueco que había entre el suelo y los cimientos del inmueble. La mayoría de ellos fallecieron en pocas horas o días al ser encontrados por la Guardia Civil y sus nombres quedaron reflejados en el libro La Guerrilla en 1945, de José Aurelio Romero Navas. Entre ellos destacaba el del histórico dirigente del Partido Comunista Ramón Vías.

Algunos de estos y otros muchos nombres tendrán muchos años después un cuerpo aparejado a ellos. Con los análisis de ADN y su cotejo con los datos que se recabaron de 300 de los familiares de fusilados se culminará un trabajo iniciado hace una década por personas que, como Espinosa, habían perdido a sus familiares y conocieron que sus restos se encontraban en el cementerio de San Rafael. Un proceso que tendrá una fecha clave el próximo 7 de octubre, cuando se abordará de nuevo el Parque de la Memoria que los familiares de los fusilados han propuesto realizar en las instalaciones del antiguo cementerio de San Rafael. La antigua necrópolis acogerá un monumento simbólico que reflejará todos los nombres que ahora guarda Espinosa en un archivo excel. Sus historias no deben caer en el olvido.